Las bodegas de acrílico dan énfasis al vino

Las bodegas de acrílico se convierten en sofisticadas exhibiciones de productos para los restaurantes que han hecho del vino una parte importante de su menú; el material también permite que las casas y los apartamentos también ganen versiones más ligeras de las bodegas tradicionales

Descubre las bodegas de los Restaurantes Loup y Jangada en el vídeo:

No hay nada como un buen plato acompañado de un buen vino, dicen los amantes de la buena cocina. Pero los dueños de restaurantes saben que para mantener satisfecho al público, además de una buena carta y una buena carta de vinos, también es necesario ofrecer al cliente un ambiente que ayude a hacer más bello y atractivo este momento de tanto placer. Aquí es donde entra la importancia de la decoración y, junto a esta necesidad se añade la capacidad aumentar aún más atención a los productos que ofrece la casa. Daniel Sahagoff, dueño de Loup Restaurante que abrió sus puertas hace cuatro años en São Paulo, conoce bien el negocio y se mostró inflexible cuando le dijo a su carpintero que quería una bodega que llamara la atención de los clientes: “Ya tenía yo la experiencia de Cantaloup, un restaurante que abierto  desde hace más de 20 años en São Paulo, y quería traer para mi proprio restaurante  algo que no estubiera disponible en otros lugares. Quería que mis clientes tuvieran la impresión de que las botellas flotarían, sin soporte, y que se replicarían como un espejo ”, explica.

adegas em acrílico
Bodega en Loup Restaurante

Entonces el carpintero de Daniel, Tsutomu Taniguchi, de la Marcenaria Taniguchi , le propuso el uso del acrílico. Desde la propuesta hasta la finalización, se elaboraron algunos prototipos. Primero uno a muy pequeña escala, y luego otros con las partes de soporte y angulación de las botellas. “El acrílico es un material perfecto para trabajar con bodegas. Muy fácil de manejar y, sobre todo, traslúcido y resistente”, dice Taniguchi.

Bodega en Loup Restaurante

Pero no solamente por la transparencia y la resistencia del acrílico es que se hizo posible este proyecto. Su alta capacidad de conducción de luz también fue un punto crucial en la elección de la materia prima. A esto se debe el hecho de que la bodega se “ilumine” en numerosos puntos gracias a las luces de LED, además de los espejos, que ayudan a difundir la luz y replican la imagen de las botellas, dando a la bodega una profundidad más profunda de la que realmente tiene.

Bodega en Loup Restaurante

Satisfecho y orgulloso de su bodega, Daniel comenta: “Creo que logramos lograr nuestro principal objetivo, que era llamar la atención. Todos los que vienen aquí, lo primero que hacen es mirar la bodega”.

Un emprendedor incansable, Daniel ahora dice que la atención se centra en lanzar otro restaurante. Un lugar que reunirá, en una casa de tres pisos, tres menús diferentes. Entre ellos, una especie de ascensor panorámico, que resaltará los platos, y otra bodega de acrílico.

Bodega del Restaurante Jangada en Piracicaba

Pero la noticia no es solo en la capital paulista. En Piracicaba, el Restaurante Jangada ha puesto en marcha una bodega que también sigue llamando la atención de clientes y admiradores del buen vino. “Nuestra idea era innovar, además de mostrar a los clientes las etiquetas que sirve la casa, ya que mucha gente pide ver la bodega”, explica Denise Nogueira. También dice que otro punto importante es que la bodega ayudó a que nuestro habiente fuera aún más sofisticado y agradable”..

Bodega en Restaurante Jangada

Allí, el proyecto también está firmado por Tsutomu Taniguchi, pero ahora en sociedad con Artcryl, una empresa de fabricación de acrílico. No obstante de los muchos trabajos desarrollados en colaboración, esta fue la primera vez que ambas empresas construyeron una bodega. “Ya había visto en un viaje al extranjero una bodega en la que las botellas parecían flotar sobre estantes de acrílico. Cuando Taniguchi nos dio el briefing de este proyecto, le mostramos las imágenes que teníamos, quien en ese momento abrazó la idea”, dice Taísa de Almeida, de Artcryl.

Bodega en Restaurante Jangada

Construida con láminas de acrílico Castcril de 12 y 20 mm de espesor, la bodega alberga aproximadamente 600 botellas, que por la transparencia e iluminación especial, realizadas en LED y guiadas por un Sommelier, resultan aún más atractivas para el público.

Taniguchi destaca que la combinación de plástico noble con muebles de madera, en ambos proyectos, tanto de Loup como de Jangada, ayuda a crear una estética algo refinada.

Adega em Acrílico
Bodega en Restaurante Jangada

Para quienes aún no están seguros del uso y durabilidad del acrílico, Tiago Oliveira, representante de Castcril, explica que el acrílico es un material muy versátil y tiene un 92% de transparencia independientemente de su espesor. En el proyecto Piracicaba, por ejemplo, se utilizaron láminas de 20 mm. “Esto hace que la bodega soporte el peso de todas las botellas de forma segura. Además, es un material fácil de procesar que se puede utilizar en corte, pulido, moldeado y no sufre la acción de agentes externos, por ejemplo, a baja o alta temperatura. Por lo tanto, no se dilata, no se seca y no amarillea”, dice. No menos importante, la compañía ofrece una garantía de 10 años contra el amarilleamiento de sus placas.

Residencias y pequeños establecimientos

Afortunadamente, la sofisticación y ligereza del acrílico no solo están disponibles para grandes restaurantes o establecimientos comerciales. Los propietarios de viviendas y oficinas, además de pequeños restaurantes, también pueden ofrecer a sus invitados o clientes la visión de una atractiva bodega. Los proyectos realizados por Diagonale en colaboración con diseñadores y arquitectos muestran el poder estético y la versatilidad de este fantástico plástico.

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